En el estuche se encontro una multitud de rotuladores,boligrafos,gomas y otros objetos diversos.Perdido entre todos ellos se hallaba un viejo,pequeño y gastado lápiz.
Al terminar la clase me dirigi a casa.Nada más llegar mi madre me preguntó si teniá deberes para hacer ella ya sabía que era un desastre por eso me lo preguntaba en cuanto llegaba del cole.
Empecé haciendo la primera y la segunda página ,pero cuando comencé la tercera .Desde mi estuche saltó un lápiz que
me dejó aturdido al terminarme los deberes en menos de tres minutos.
Con aquel acierto,me volvi vago y comodón.Pero esta suerte no duró,ya que el lápiz se agotó.La suerte me dió
la espalda, porque desde entonces cae sobre mi una especie de maldición ya que cada vez que escribo con un
lápiz todo se borra y me paso horas y horas haciendo los deberes.
Me imagino que esto sera el castigo que tengo por el egoismo que tuve un dia
Kaixo, Oier. 5.B ko Amaia naiz eta iruzkin honekin, zure idazlana oso polita dela esan nahi dizut.
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